Wos regresó a Barcelona después de un año y medio con un espectáculo cargado de energía y rock en el Alma festival.
El artista argentino, conocido internacionalmente por su rap y sus letras a gran velocidad, también es un
referente en la reflexión lírica. En un mundo donde lo efímero prevalece, Wos logra transmitir ideas profundas a través de canciones intensas.
El pasado sábado 29 de junio, en el Poble Espanyol, presentó su nuevo disco,»Descartable», describiéndolo como un ritual que confirma su evolución y continúa enriqueciendo su carrera.
El concierto comenzó con temas del nuevo álbum, destacándose una puesta
en escena impresionante con una pantalla gigante en el fondo.
Fiel a su estilo,Wos desbordó energía en el escenario, incluso en las canciones más
tranquilas. El concepto de «ritual» que utiliza para definir tanto su LP como su espectáculo se reflejó claramente en su actuación.
Uno de los momentos más memorables de la noche fue la interpretación de
«Arrancamelo«, uno de sus singles más populares, cuya letra proclama: «Prefiero lo tortuoso del ritual que lo decoroso de estar siempre igual«.
Esta filosofía inconformista resonó profundamente en el público.
La presencia de una banda en vivo, algo inusual entre sus compañeros del
Quinto Escalón que han virado hacia el trap o el reggaetón, sigue siendo
fundamental en su propuesta artística.
El nuevo álbum, con un fuerte acercamiento al rock, lo exige. La versatilidad de Wos quedó demostrada con «Morfeo«, una canción más cercana al pop.
Durante el concierto, Wos interpretó grandes éxitos como «Melón Vino«,
«Canguro» y «Okupa«, culminando con la emotiva interpretación de «Púrpura«, la canción que lo catapultó a la fama.
Envuelto en una bandera argentina, el público coreaba «Una más y no jodemos más«. Para cerrar definitivamente el espectáculo, eligió «La Cochería«, otra canción del nuevo álbum, cuya letra,
«buscando una otra vez melodías que quiten la sed», parecía anticipar lo que vendrá tras su gira, que recorrerá España este verano y concluirá en Rosario, Argentina, a finales de noviembre.
Texto: María Cortés